De los poetas que amo
nada quiero
ni los rostros que tuvieron
ni sus historias malditas
ni los jardines donde
agonizaron sus flores
ni los muertos que portan
en los gestos y en
los confusos surcos
de sus contrariadas frentes.
Nada , salvo algunas
de sus palabras
por ejemplo cuando escriben
amor y precisan
los contornos del abismo
cuando la noche se desploma
y se torna boca ciega
devorando la luminosa
certeza de la Duda
No hay comentarios:
Publicar un comentario